Por: Constanza Rueda Valbuena ~ Directora de Calidad y Gestión Humana SoftManagement S.A.
En el mes de marzo de 2018 el CMMI Institute lanzó la versión 2.0 del modelo CMMI (Capability Maturity Model Integration), el cual se había mantenido en la versión 1.3 desde el año 2010, la cual estará vigente hasta finales del presente año.
La nueva versión busca responder a los retos que las empresas enfrentan actualmente ante una economía cambiante y dinámica y negocios cada vez más exigentes; con mayor alcance, menor tiempo de ejecución y un cliente enterado y activo.
Uno de los aspectos que más llama la atención de la nueva versión, es que reúne en un solo documento los requisitos para desarrollo, servicios y adquisiciones que antes se encontraban dispersos en tres modelos separados, uno para cada tema. También vale la pena resaltar la inclusión de un apartado con las prácticas adaptadas para aquellos casos en los que el desarrollo se realiza mediante metodologías ágiles, complemento de gran valor para las compañías de software que usan este tipo de estrategias para la ejecución de sus proyectos.
La gestión de riesgos, que ya estaba incluida en la versión anterior, es enriquecida ahora con la gestión de las oportunidades, lo que genera un panorama completo para el proyecto y le permite prepararse para enfrentar, de la mejor manera, tanto las situaciones que le generan amenaza, como aquellas que pueden convertirse en algo positivo.
El nuevo modelo busca, además, alinear la implementación de las prácticas con el logro de los objetivos de la organización, la mejora de las capacidades de los procesos y el desempeño del negocio. En concordancia con lo anterior, el proceso de valoración, ahora llamado Benchmark, se enfoca en validar que las organizaciones logran beneficios tangibles en sus negocios a través de la adopción de las prácticas del modelo.
Al igual que otros modelos de mejora, sus beneficios solo se podrán ver materializados si las organizaciones se toman en serio su implementación y adaptan sus prácticas a la realidad de la compañía y no al contrario.